Foto: GCB Comunicación Digital.
Juan Pedro Domecq, vicepresidente de la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia (RUCTL), firma esta «tercera» de ABC el día en que la casa cumple 120
A continuación, transcripción completa del texto:
«La Real Unión de Criadores de Toros de Lidia cumple hoy 120 años. Compartimos desde las páginas de ABC la inmensa alegría que tenemos como institución por haber llegado hasta aquí, a la que se suma el orgullo de que S. M. el Rey Don Felipe VI haya aceptado la presidencia de honor. Por esta casa, que es la de todos los taurinos, ha pasado ya más de un siglo de toros siendo testigos directos de los grandes acontecimientos que han sucedido en la fiesta. Los tres pilares sobre los que nuestros fundadores cimentaron las bases de la RUCTL fueron cruciales para que desde entonces seamos la voz del toro, del campo y de sus trabajadores. Hoy nuestro papel abarca una responsabilidad enorme. Nuestra misión es honrar al toro bravo y a quienes nos antecedieron, cuyo legado es el gran patrimonio genético del animal más fascinante y hermoso que tenemos en nuestro país.
Desde la primera directiva de la historia de la RUCTL y presidida por D. Cristóbal Colón y de la Cerda, Duque de Veragua, creo que hemos sabido evolucionar como institución adaptándonos a la transformación que ha vivido nuestra sociedad y, por lo tanto, la tauromaquia. Y es que España, a lo largo de la segunda mitad del siglo XX, ha pasado en muy pocas décadas de un modelo rural dominante al gran éxodo hacia la ciudad que protagonizaron las siguientes generaciones en busca de comodidades que la España del sector primario no ofrecían. Ese giro de 180 grados cambió nuestro modelo de vida, pero inevitablemente también nos afectó decisivamente en la llegada de nuevos hábitos que nos cambiaron extraordinariamente: la ‘humanización’ del mundo animal como discurso y la llegada de nuevos paradigmas como pretexto puso en manos del «mascotismo» un poder desconocido hasta entonces al que nos hemos tenido que enfrentar en ese primer cuarto de siglo actual. En un primer momento quizás nos costó reaccionar, pero entendimos que nuestra fuerza no era la defensa, necesitábamos mostrar sin ambages las bondades socioambientales que garantiza la crianza del toro. A diferencia de lo que muchos pensaban, el toro tomó el papel que le correspondía como guardián y protector de la dehesa y, al mismo tiempo, reforzó el protagonismo que el toro tiene en la plaza donde se manifiesta en todo su esplendor.
En el globalismo por el que camina el mundo ahora mismo la Real Unión de Criadores de Toros de Lidia ha conseguido liderar proyectos clave en lo específico basados en el I+D+I y con la mirada puesta en Europa de quien dependemos en el ámbito legislativo. La creación de equipos permanentes de trabajo para el fomento y protección del patrimonio genético que representa la ganadería brava está siendo uno de los grandes desafíos de cara al presente y al futuro. La fuerza que nos impulsa es que representamos a la raza autóctona más importante de España, por censo, valor genético y representatividad. Somos la “raza de razas”. Fomentar la contribución del sector privado en la conservación de la raza o impulsar la acción conjunta del mundo rural y cultural son también dos ejes que nos impulsan en este proyecto de alianzas.
Pero en estos últimos dos lustros hemos entendido también la necesidad de liderar nuevos proyectos desde el activismo. Así lo creímos cuando en 2015 estuvimos en la constitución de la Fundación del Toro de Lidia como órgano de defensa y promoción de la Tauromaquia. Somos conscientes de que aún queda mucho trabajo por hacer dentro de las instituciones para que el toro bravo reciba el trato que le corresponde, Desde un modelo de gestión propositivo hemos querido potenciar la imagen del toro con la creación de la Federación de Asociaciones de Raza Autóctona de Lidia o la obtención del logotipo 100 % Raza Autóctona, calificación obtenida del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, para la puesta en valor de la carne de bravo que culminó en 2021 con los proyectos europeos e innovación “Go Tauro” y “GoAgrochef”. La creación de las marcas “Toro sostenible” y de “Ecoturismo bravo” son otros dos distintivos que contribuyen a abrir nuevas líneas de negocio asegurando el presente para mirar al futuro con optimismo. El último eje, y no por ello menos importante, en cuanto a enseñar y defender al toro bravo está en Europa. Cuando en 2019 organizamos en la sede del Parlamento Europeo la exposición fotográfica sobre el toro y el campo entendíamos que había que prepararse a la futura negociación en Política Agraria Común, posicionándonos dentro del marco divulgativo y de sensibilización sobre un animal tan excepcional.
El ganadero es el alquimista que debe interpretar los gustos de el público de cada época y cincelar con su arcilla sobre la base de la bravura. Tengo el inmenso honor y la enorme responsabilidad de pertenecer a la cuarta generación de una estirpe ganadera fundamental en el desarrollo de la historia de la tauromaquia del pasado y del presente siglo. Para mí, la tauromaquia no puede explicarse sin determinar antes la época de la que estamos hablando, porque su gran secreto es su constante capacidad de evolución, razón que le ha hecho adaptarse a las costumbres de cada época y de ser aceptada, elogiada, amada o vituperada, pero siempre conservando su vitalidad y esencia a lo largo de toda su historia».