Se consumaron los peores presagios. El Parlamento de Cataluña acaba de aprobar por 68 votos a favor, 55 en contra y 9 abstenciones la prohibición de las corridas de toros en todo su territorio. La Ley entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2012. La votación se ha producido a las 11:38 h. y nada más reflejarse en el panel del Parlamento, los taurinos han sentido gran tristeza. Llama la atención las lágrimas del torero Serafín Marín que se encontraba, entre otros, en el palco de invitados presenciando este pleno. Se consuma así una terrible agresión a los derechos de las personas que libremente acuden a presenciar un espectáculo. A partir de 2012 los aficionados catalanes tendrán que cruzar la frontera como ya hicieron en tiempos donde no había un régimen democrático. Antes fue el cine que para salvar la censura tenía que proyectarse en Francia y ahora es el turno de los toros.