Esta tarde ha fallecido, en San Sebastián, en el Sanatorio Nuestra Señora de Aranzazu, Manuel Martínez Flamarique, “Manolo Chopera” a la edad de 75 años a causa de una penosa enfermedad. Manuel Martínez, nacido el 7 de marzo de 1927 fue claro continuador de la tradición empresarial taurina emprendida por su abuelo, Severino, y después su padre, Pablo Martínez Elizondo. Una labor que comenzó en las plazas del norte, caracterizada siempre por el rigor y seriedad.

A finales de los años 50 Manolo Chopera tomó el timón empresarial de la familia para ya no dejarlo hasta aproximadamente 1998, donde quedó coronada su trayectoria con la inauguración de la plaza de “Illumbe” (San Sebastián), un coso multiusos que vino a cerrar el largo paréntesis sin toros que había vivido la ciudad que le viera nacer y hoy morir, y que fue la guinda a una carrera repleta de éxitos.

Sería muy largo enumerar las plazas regentadas, dirigidas y en propiedad que tuvo a los largo de su vida Manolo Chopera. Las más grandes de España, Francia y Suramérica fueron gestionadas por él. Como apoderado también destacó, pues llevó a figuras como Paco Camino, El Cordobés y Antoñete, entre otros.

En 1957 la familia Martínez decide comprar un hierro de la Unión de Criadores de Toros de Lidia, cuyo dibujo es cambiado por el actual de las cadenas con la ‘M’ inscrita dentro. La procedencia, vía Graciliano – Pérez Tabernero – línea Santa Coloma, es mantenida y aumentada, en 1964, con reses de Joaquín Buendía Peña, anunciándose desde 1976 a nombre de hijos de Pablo Martínez Elizondo. En 1990 y en 1992 compran reses de “Sepúlveda” y de Luis Algarra Polera para después, en 1995 eliminar todo lo que procedía de Santa Coloma. Actualmente, Manuel Martínez Flamarique era el representante del hierro, conservando como procedencia actual: Atanasio Fernández Iglesias y Juan Pedro Domecq y Díez.